martes, 29 de diciembre de 2009

FELIZ AÑO NUEVO. SHANA TOVA

Ya son pocas las horas que faltan para que este año de dos mil nueve finalice, y como la hoja caduca del abedul, la última de las hojas de mi almanaque será arrancada y alojada como las demás en la fría papelera de metal de mi estudio. Son pocas las horas y aun menos los días que faltan para que queden atrás multitud de secuencias vividas a lo largo de trescientos sesenta y cinco días, pasados al compás mas bien de una ópera de Verdi, tomemos por ejemplo Rigoletto, un intenso drama de pasión, engaño, amor y venganza que tiene como protagonista a Rigoletto, el bufón jorobado de la corte. Como la vida misma, solo vasta con valorar el drama que cada día pasan miles de familia que anegados por el desconcierto del desempleo están pasando situaciones desesperadas, o tantas otras que ven como un famliar cercano deja de existir víctima de la violencia de género, accidentes de tráfico, drogas, etc. El engaño al que son sometidos otras tantas miles de personas con contratos temporales y basados en la ley del poder, o la opresión de las entidades bancarias con subastas a diario. La pasión con la que cada mañana comenzamos un nuevo día entregando todo los que podemos dar de si, para que el mañana, lleno de incertidumbres, sea al menos un día igual que el de hoy o un poco mejor. El amor hacia los nuestros, al prójimo y al no tan prójimo pero que a la vez se convertirá en el más allegado del mañana. Y la venganza, quizás creada por una sociedad inestable, sostenida en la punta de la pirámide invertida por nosotros mismos del desasosiego, la crueldad, la falta de sentimientos y la infamia.

Ya son pocas las horas, quizás queden minutos convertidos en los herederos de un tiempo pasado que fue mucho mejor, y antecesores de un tiempo nuevo, esperanzador y lleno de ilusiones para todos. Estoy plenamente convencido, que este año que comienza vendrá cargado de nuevas expectativas, envuelto en una luz diferente que otra vez vencerá a los continuos ataques de la oscuridad, y sobre todo conciliador, mediador entre lo bueno y lo malo, lo bien y mal hecho, lo correcto y lo incorrecto, lo positivo y lo negativo, lo cierto y lo incierto. En definitiva será el año de aquellos para los que el pasado más reciente hizo mella y el tiempo quiere recompensar con aires nuevos.

Los deseos se alimentan de esperanzas, como dijo Don Quijote, por eso mi deseo para el dos mil diez que se avecina, y que ya prácticamente tenemos encima, es que llenemos de esperanza nuestras alforjas, tanto como podamos, para que al caminar por el nuevo año, podamos alimentarnos de cuantos deseos nos sean necesarios para vivir dignamente y en paz.

jueves, 17 de diciembre de 2009

MALAS PERSONAS

Seguro que alguna vez, en algún momento de tu vida te has encontrado con malas personas, con este tipo de gente que por sus actos y acciones no sabemos si quieren a alguien o mejor dicho se quieren a si mismo. Por desgracia hay muchos por el mundo, a veces nos toca convivir con ellos de forma muy cercana, nos los encontramos en el trabajo, en la calle paseando, en lugares de ocio que frecuentamos normalmente, entre aquellos que consideramos nuestros amigos o familiares, están en todas partes, pertencen a multitud de colectivos, pero claro esta, es tan variado y conseguido el dizfraz con los que nos los podemos encontrar, que a veces son difíciles de detectar.

Se muestran con caritas de santos y hombres buenos, muchos de ellos son los más cristianos y se golpean el pecho en señal de auto culpa compulsiva, tienen las rodillas peladas de reclinarse ante el santísimo y la voz parece que les sale del mismo culo - con perdón- cuando se dirigen a las personas buenas que les rodean. Son caritativos compulsivos, pero que se les vea que hacen caridad, quieren destacar en algo y darse a conocer aunque para ello tengan que pisotear al mismísimo Dios. No cumple con aquellos que depositaron su confianza y trata mal a aquellos que están en su órbita de acción. Suelen tener varias caras, dependiendo del día, la hora, el lugar, me atrevería a decir que incluso poseen en sus genes una parte femenina, que cada veintiocho días se muestra e irrumpe al exterior dejando una estela de desconcierto generalizado. Son destructivas, criticonas, les gusta obstaculizar todo lo que la gente buena intenta llevar a cabo, son crueles con sigo mismo y los demás, no tienen el don de ser y menos aun el don de estar. Son pobres desgraciados a los que la vida nunca les dio la posibilidad de ser algo más que la pobre proyección de su sombra en el sucio suelo o la cercana pared.

Tal vez conozcas a este tipo de personas, por desgracia, quizás te tocó convivir con una o varias de ellas, pero como decía mi buen amigo Quijote “que te lleve el diablo, mala persona, que a las buenas ya las deja Dios en la tierra”. Y piensa que de este tipo de gente cada vez quedan menos, por lo menos por las calles, ya que después de haber echo todo el daño que podía hacer, después de haberse envenenado con su propio veneno cierto día que se mordieron la lengua asimismo, sólo les quedó recluirse en sus casas, una tumba cavada por ellos mismos a lo largo de su vida para enterrase y dejarnos vivir en paz.

martes, 15 de diciembre de 2009

POR FIN SIN HUMOS

Al fin, y de una vez por todas pondremos el punto y coma, aunque me gustaría que fuese un punto y final, a una de las actuaciones del ser humano que más daño han hecho a lo largo de su historia, son tantas las muertes que ha provocado el hecho de fumar entre los humanos, que se podría comparar con el mayor cataclismo conocido, y que cada cual valore y cuantifique.

Ayer, pudimos ver en las portadas de todos los periódicos que el El Ministerio de Sanidad y Política Social prohibirá fumar en espacios públicos cerrados, locales de ocio y restaurantes en 2010, "el problema no es que se fume en lugares públicos, sino en lugares públicos cerrados".
La ministra constató que las "conversaciones están muy avanzadas" y la posición es bastante mayoritaria en el seno del conjunto de grupos políticos con lo que viene a decir que prácticamente esta hecho. Ya era hora que el salir con la familia a almorzar, tomar un café o cenar, se convierta en una tarea de libertades, hasta el momento, son muchos los bares, restaurantes y cafeterías a las que yo particularmente no voy, simplemente por salvaguardar la salud de mis pequeños.

No es lícito que el simple hecho de tomar un café en la cafetería más cercana sea sinónimo de llegar a casa oliendo a humo de tabaco, de tener que cambiarte de ropa para poder coger a los pequeños y hacer de un acto social y saludable, una quimera personal contigo mismo y los tuyos.

Esta ley que ayer fue fecundada en el vientre de nuestra sociedad, dentro de poco provocará el nacimiento más deseado por la gran mayoría de los ciudadanos, y estoy completamente seguro que marcará un antes y un después en la vida social, familiar y personal de muchas personas. Entiendo que la salud de todos se verá correspondida por dejar de hacer algo insalubre para el que fuma y para los que respiramos el humo ajeno.

jueves, 10 de diciembre de 2009

DIARIO, DIARIO, DIARIO

Es tan ligera la lengua como el pensamiento, que si son malas las preñeces de los pensamientos, las empeoran los partos de la lengua, eso decía mi buen amigo Quijano, …. Y que rezón llevaba ….. vasta con encender la televisión en horas puntuales o hacer lo mismo con la radio para comprobar el insípido calado que están tomando las noticias actuales, por un lado la corrupción, aquí te pillo y aquí me lo llevo, no importa el color político, cada fachada posee en su interior los mismos contenidos ávaros. Por otro la rebeldía de la Iglesia Católica, puntualicemos, con sus sonoras pataletas pasadas de de moda como la ropa que dejamos de ponernos, ahora le toca a la ley del aborto, veinte años despues de su aprobación.
Por otro lado el pobre y desconcertado discurso del no, de lo peor, de lo mal hecho, del fracaso, en definitiva del desconcierto de los partidos de la oposición al Gobierno, una artimaña que únicamente deja cada vez más piedras alojadas en el tejado de nuestro pais. Por otro lado y como no, los datos del desempleo, algo que en cierto modo a todo nos incumbe aunque a cada uno en una medida diferente, recuerda aquello de “ cuando veas las barbas de tu vecino cortar, pon las tuyas a remojar y se consecuente. Y por último, y pasando por alto algunas otras noticias que no dejan de ser importantes, la violencia de género, que casi todos los días nos ofrece una peor imagen de la raza humana, un sinsentido que a pesar de ser la herencia de un pasado no muy lejano, ya es hora de erradicar de una vez por todas.
Pero claro está, sin este gazpacho de revelaciones diarias, sin este menú de bar de carretera que cada día se nos ofrece con más bien pocas variantes pero con más especias que la semillería de mi vecina, no seríamos nosotros mismos, nunca tendríamos la imagen real de donde estamos, dónde vivimos, qué compartimos, quién nos rodea, hasta cuando y hasta dónde podemos o debemos llegar, sin este variado de suculentas y tolerantes noticias no se podrían rellenar de tinta los grandes folios de los periódicos ni cubrir la media hora larga de un telediario.
A pesar de todo, merece la pena, en ocasiones abrir la ventana de la información y recibir una bocanada fresca de buenas noticias, de actualidad renovada y certera, de datos positivos, de operaciones que regalan vida, de actos sociales que devuelven ilusiones, de cooperaciones internacionales que hacen felices a millones de niños, de fronteras que desaparecen y armas que se quedan en los almacenes militares, en fin del buen hacer por nada, de gracias sin retorno y de un aliento de vida para el que nunca pidió nada.

Y piensa que aquellos que nos hacen llegar información, lo hacen con una lengua tan ligera que ni siquiera sus mentes pueden procesar a gusto, y que a veces las preñeces de sus pensamientos hacen de la las noticias cálculos algebraicos que a duras penas resolvemos. Menos mal que la hora corta del parto de la lengua, nos reporta el buen rollo necesario para irnos a la cama con la ilusión de que mañana seguro que será un buen día.

miércoles, 11 de noviembre de 2009

"PODER INSOBERANO"

El poder de la palabra, o mejor dicho, el poder de la escritura, que en definitiva es la que queda para siempre y viaja más lejos, ha sido desarrollada desde tiempos inmemoriales por el hombre para de una forma u otra dejar plasmada su impronta existencia, las primeras referencias escritas que se tienen se remontan al 4000 a. C., pero la escritura ha evolucionado a través del tiempo, así hoy día, la palabra escrita puede viajar a millones de kilómetros o ser trascrita a varios idiomas con un solo clip de ratón. En definitiva la palabra escrita se ha convertido en la actualidad en un arma de doble filo, a veces en un juego peligroso sin razón, y en alguna que otra ocasión en la caja de Pandora de un subconsciente existencial.

El poder de la tinta, indeleblemente unido al majestuoso poder de Internet, han conseguido traspasar todas las fronteras para llegar de una forma u otra a todos los hogares, a todos nosotros, pero te imaginas que yo, desde este blog utilizara esta unión, la de la libre escritura e Internet sin barreras, esta herramienta tan sofisticada a la vez que peligrosa como arma para atacar a todos los que me atacan e insultaran, a los que me declarara la guerra, a mis enemigos y a los enemigos de mis amigos, te imaginas que mintiera y la manipulara para defenderme o defender a mis colegas por indefendibles que fueran sus actos o acciones, que aberración

Te imaginas que utilizara un instrumento tan potente como este para mis intereses personales, para machacar cruel y sistemáticamente a los que no me gustan, a los que me estorban, a los que no se someten a mis caprichos, a los que no me ríen las gracias o simplemente me caen mal. Te imaginas que con la fuerza que tiene un blog, yo te señalara desde aquí, y con mi dedo acusador le gritara a todos… a por él, a por ella, no te parece que sería indecente, canalla, inmoral, una imperdonable falta de ética, de clase, de estilo y de humanidad, si, te lo imaginas.

Pues no idolatres ni aplaudas a los que lo hacen constantemente, a aquellos que utilizando el “insoberano” poder que poseen y abusan de ello para hacer daño. Y tu, deja de manchar con tinta la pulpa del árbol que nació sumiso para ti, y no mortifiques más las teclas de un teclado sucio y ennegrecido para tu absurda conveniencia. Ya esta bien.

martes, 3 de noviembre de 2009

ADIOS A DON FRANCISCO AYALA

Se dice que cuando muere una persona mayor, se quema una biblioteca. En el caso de Don Francisco Ayala estamos en el caso en que la biblioteca no se quemará por completo, permanecerán para siempre sus libros, y sobre todo un poco de su personalidad en cada uno de nosotros. El nos ha dejado a sus 103 años; el último de los republicanos de la generación del veintisiete, tras una larga y fructífera vida personal y cultural, llegando a convertirse en todo un referente moral para la cultura lationamericana.

Su biografía es una radiografía de la historia de España: licenciado en derecho en Madrid, continúa sus estudios en Alemania, convirtiéndose en Catedrático de Sociología de la Universidad Complutense en 1932, cargo que tuvo que abandonar al estallar la Guerra Civil, comenzando una vida de exilio que le llevó por medio mundo: Argentina, Brasil, Nueva York. En Buenos Aires continuó su carrera en la universidad como docente, actividad que abandonó en 1977. A partir de los años sesenta, va volviendo poco a poco a España, hasta fijar su residencia nuevamente en Madrid. Pero como el mismo dijo "La patria del escritor es su lengua".

El de Ayala es el perfil extraordinario de una persona que fue capaz de mirar a la gran literatura del siglo XIX en sus dos primeras novelas, que tuvo el acierto de ejercer también de narrador vanguardista y culminó su carrera literaria con dos grandes novelas como "Muertes de Perro", '"En el fondo del vaso" o la fantástica "El jardín de las delicias" que es un libro de recuerdos y vivencias en el que Francisco Ayala, como en el cuadro homónimo de El Bosco, aborda la dicotomía entre el amor y el dolor, la ternura y la crueldad, la vida y la muerte.

Títulos como "La cabeza del cordero" o "La invención del Quijote" donde en lugar de una novela seria Ayala describe al Quijote como mera anécdota de Cervantes, una crítica irónica a los caballeros andantes que nunca existieron y sin embargo volvieron loco a don Quijote, al tratar de leerlo surge la sensación de que estás en frente de una novela de caballería, ocupan ya un lugar de honor en la historia de la literatura. Un lugar en el que sus memorias, Recuerdos y olvidos, tienen su propio espacio dentro del género autobiográfico.

Quisiera recordar unas palabras, una reflexión que hizo en una entrevista hace unos años y hablaba así sobre los libros; "el libro es el único objeto en el mundo que cuando se usa se renueva. Cada vez que alguien, en algún rincón del mundo, abre las páginas de una novela cualquiera, eso personajes vuelven de nuevo a la vida. A una vida que siempre es diferente y distinta con cada lectura porque, cada uno de nosotros es lector único, diferente y distinto. Cada lector, encuentra y descubre asuntos muy diferentes en las mismas historias, aspectos desconocidos, desapercibidos hasta para el mismo que lo escribió".

“Soy un cómico que lleva años esperando a que se baje el telón, pero no termina de bajarse". Ese metafórico telón del que hablaba el escritor granadino, ha bajado esta misma mañana en Madrid pasadas las 12. Después de haber sido un poco enterrado por el exilio, por su ideología de izquierdas , Ayala fue reapareciendo poco a poco en la vida literaria de España, estoy cansado de mi nombre", llegó a decir, sin saber que su nombre nunca nos cansará a sus lectores por muchos años que pasen.

jueves, 29 de octubre de 2009

CON LA IGLESIA EMOS DADO, QUERIDO SANCHO

Y advierte, Sancho, que yo veo poco, que aquel bulto grande y sombra que desde aquí se descubre la debe de hacer el palacio de Dulcinea.

-Pues guía vuestra merced – respondió Sancho -: quizá será así; aunque yo lo veré con los ojos y lo tocaré con las manos, y así lo creeré yo como creer que es ahora de día.

Guió don Quijote, y, habiendo andado como doscientos pasos, dio con el bulto que hacía la sombra, y vio una gran torre, y luego conoció que el tal edificio no era el alcázar, sino la iglesia principal del pueblo. Y dijo:

-Con la iglesia hemos dado, Sancho.

-Ya lo veo – respondió Sancho -; y en verdad aquel bulto grande y sombra se puede ver como yo la vi, ¿habéis estado alguna vez en el Vaticano?, una obra arquitectónica impresionante, digna de contemplar hasta el más mínimo de los centímetros, pero yo la describiría como la mayor obra, llamemosla "faraónica" jamás realizada, además pagada con la fe de todos los cristianos, y sobre todo centro jerárquico y financiero de la Iglesia Católica, de antes y de ahora.

Si seguimos analizando el pasaje, dice … aunque yo lo veré con los ojos y tocaré con las manos, y así lo creeré….; a pesar de la irreverente locura de Don Quijote, no se deja convencer por falsas sombras, quiere palpar con sus propias manos, la realidad que le ataña. La realidad actual la podemos tocar, porque es táctil, todos los días, en cualquier periódico podemos leer un artículo dedicado a la Iglesia, a las controversias con el estado y sobre todo a las barreras que ésta quiere poner al progreso, a la investigación y sobre todo al desarrollo de una sociedad moderna y futurista.

España es un Estado soberano que además de contar con el Poder legislativo, donde se decide sobre sus propias leyes, no tiene que tolerar las injerencias del Vaticano, no hay nada que la Iglesia pueda reprochar a los suyos ya que Iglesia somos todos, y sobre todo solicitar un diálogo vacío de contenido y pasado de moda, precisamente porque los que forman la iglesia no respetan el diálogo sino que lo que les gusta es imponer su propio criterio.

Estamos asistiendo a lo que podríamos definir como un envalentonamiento de la jerarquía eclesiástica española que, en un alarde de nacional-catolicismo, arremete contra las leyes aprobadas en el Parlamento, que es el órgano de representación de todos los españoles y reflejo de la voluntad popular.

Y en esta tesitura nos encontramos. A día de hoy todavía tenemos que dar explicaciones a la iglesia de que se avanza en materia de libertades porque las sociedades evolucionan de manera natural y hay que adaptarse a las nuevas necesidades, porque la utilización de anticonceptivos puede paliar epidemias en los países subdesarrollados, de por qué las mujeres deben ser libres para interrumpir su embarazo con intimidad y seguridad jurídica, por qué es necesaria una ley de libertad religiosa que va en función de esa evolución social.

Laicidad es la independencia entre la iglesia Católica y el Estado, independencia del poder público del religioso. Lo cual no atenta para nada con el derecho individual de cada uno a profesar la creencia que quiera. Pero ocurre que, como decía al principio, la iglesia lo quiere todo, poder político y poder económico, y con estas reformas ve amenazados ambos.

Creo que la Iglesia, con estas agresiones verbales y desafiantes, lo que está reclamando es una revisión de las relaciones Iglesia-Estado, pero no para intentar arreglar el mundo, sino para pactar la asignación económica que éste empleará en los presupuestos generales del Estado para el ejercicio que viene.

Con la iglesia (fíjate bien, en minúscula, como la escribió Cervantes), hemos dado querido Sancho, pero ya no es la Iglesia de Cristo que se creó hace casi dos mil años, aquella que estaba con los pobres y perseguidos. Es la Iglesia de los ricos y poderosos. Mala aplicación del Evangelio.

lunes, 12 de octubre de 2009

LADRAN LOS PERROS SANCHO ...

“Ladran los perros mi querido Sancho, luego cabalgamos”, esta frase que ni siquiera corresponde a un fragmento del Quijote de Cervantes, sino que de forma anónima fue introducida en la gran leyenda que ocupa este singular libro, lección de vida, pasado, presente y futuro de quienes algún día pasamos la página de la sensatez para comenzar las líneas de la eterna locura, servirá para extrapolar una forma de ser, un método que algunos utilizan sabedores del daño que provocan, para perturbar la vida de los demás.

Ha pasado el tiempo, pero aun resuenan en mi mente los ladridos de aquellos perros, que son sólo ecos lejanos de los aullidos de quienes están inmersos en las húmedas mazmorras de sus maltrechas y solitarias almas, y pretenden con sus zancadillas y espantos soberanos desequilibrar y asustar a quienes queremos cabalgar por los inhóspitos caminos sin señales ni indicación alguna, caminos de esperanza infinita, progreso y auto renovación compulsiva.
Ladridos sin sentido, salvo la rabia de la ignorancia, de quienes se creen dueños de un universo sutil, y quieren esclavizar a los que intentan saltarse las leyes impuestas por interesados sin escrúpulos o manipuladores reverentes capaces de todo, en vez intentar cabalgar en su propio caballo y recorrer el camino de la verdad. Pero claro esta, y es ahí donde radica el sentido más razonable de esta frase, si no fuese por los ladridos de éstos perros, ni siquiera nosotros mismos reflejados en el espejo de vida, sabríamos que cabalgamos.

Día a día nos movemos en la soledad de nuestro propio yo, o en compañía de la desesperada unión entre uno mismo y su propia fe, nos abrimos paso en un camino tortuoso en medio de la oscuridad acompañados de "Sanchos" silenciosos, siempre escuchando ladridos, que son heridas impertinentes de nuestra existencia y a la vez la mejor señal de que se avanza. Son perros callejeros y despechados, perros carroñeros, pequeños perrillos marcados por la inconsciencia heredada de sus mayores, no importa de que calaña procedan, lo importante es que todos ladran en solitario o al unísono, pero todos ladran.

Aunemos todas las fuerza que nuestro cuerpo permita ejercer, arreemos a nuestro fiel “Rocinante”, para con la mayor de las ilusiones y con más ganas que nunca poder luchar contra los molinos de la crueldad, la intolerancia, la marginación, el racismo, la incomprensión y sobre todo la sinrazón heredada. Seamos dignos de cumplir con las expectativas que desde que nacemos traemos designadas, cabalguemos con fuerza por los abruptos caminos, porque lo andado es lo ganado y el final aun lejano cada vez esta más cerca.

martes, 29 de septiembre de 2009

TRADICIONES

Junto a la luz, el paisaje, y el ambiente, hay un cuarto elemento que forma y moldea a las persona; la tradición. Esta doctrina y costumbre conservada a lo largo de los tiempos y heredada por transmisión de padres a hijos, es esencial porque al configurarlo, le entrega una herencia decantada durante generaciones y en su conservación, es más en su depurada y acrecentada transmisión, puede estar mucho de su gloria o de su fracaso.

La tradición no es una masa inerte que se recibe en las manos, para entregarla igual a los que nos sucedan. En la tradición se cumple la ley de que las cosas crezcan permaneciendo en si mismas, porque las esencias son permanentes e inmutables y el secreto de su evolución adecuada, es el de descubrir en cada época un nuevo aspecto.

Convine tener claros los conceptos, porque la tradición es fundamental para una vida en orden y equilibrada y de su claro concepto y diáfana noción, están dependiendo de que sean símbolo de prosperidad o monumentos fosilizados dignos de una exposición en un museo, han pasado siglos y siglos y en la mayoría de ellos, han labrado ese depósito transmitido de generación en generación, haciendo llegar hasta nosotros, no ya un tesoro incalculable de riqueza y expresión plástica, sino algo más rico y al mismo tiempo perdurable, un estilo, un modo de ser y de comprender que la hacen personal y distinta. Y fiel al buen concepto, en cada época, hemos de descubrirle un nuevo aspecto que, depurándola, la enriquezca y acreciente.

Por eso me manifiesto como un defensor de las tradiciones más arraigadas, de aquellas que aun pareciendo pretéritas y desfasadas aun conservan la esencia viva de lo que fuimos, somos y seremos. Y estoy completamente seguro que sirve también para cimentar la cohesión social, algo que en estos tiempos nos viene tan bien.

domingo, 20 de septiembre de 2009

MAGDALENA DE LA CALLE

Hace unos días, llegó a mis manos un periódico donde en letras mayúsculas y negritas, para destacados decía, “El Gobierno ha asegurado hoy que su prioridad no es legalizar o abolir la prostitución sino acabar con las mafias que explotan a las mujeres, dignidad para el oficio mas antiguo del mundo”, pues bien, intenté leer el artículo presionado por el tortuoso ruido que hacía la máquina de café de la cafetería y el estruendo bullicio que provocaban los clientes. Poco a poco y mientras me sumergía en un mar de letras casi sin sentidos, la tinta negra y rugosa de las mal blanqueadas páginas se volvieron púrpuras de recuerdos y nostalgia.

No a mas de un mes, estando en el hospital visitando a un amigo convaleciente por una dolencia lumbar, coincidí en el pasillo con una mujer que me pidió agradablemente que le sujetara la barra rodante que aguantaba el suero que tenía conectado a la vena, ese líquido insignificante y transparente que gota a gota inyecta vida a miles de pacientes cada día, una gota de esperanza para un cuerpo que casi no se aguantaba erguido, pero que aun conservaba la esencia vigorosa de una pasada pubescencia, bastaron unos escasos minutos para que esa mujer me contara en pocas secuencias fotográficas la historia de su vida. Magdalena de la calle, se hacia llamar, mujer de la vida, obligada a ejercer la prostitución desde muy temprana edad, maltratada por “chuscos” despiadados, y abandonada y apartada por crueles compañeras de oficio, el sida se instaló en su castigado cuerpo a los cincuenta y siete años y atrincherada en la fortaleza de la que aun presumía, intentaba batallar en una guerra que técnicamente ya tenía perdida.

De sus torpes, temblorosas y sufridas palabras, a la vez que una gota de lágrima resbalaba por su mejilla como si se hubiese escapado del bote de suero, se desprendió levemente un nombre, Miguel, su hijo, del que no sabía nada desde hacía más de diez años, las circunstancias de la vida lo habían querido así, un niño que tuvo que abandonar a muy temprana edad en la puerta de un hospicio porque no tenía recursos para alimentar ni cuidar dignamente. Una historia que me hizo tragar saliva, haciendo que la nuez de mi garganta en un movimiento ascendente y descendente delatara la triste situación que estaba viviendo. Me preguntó si yo conocía a su hijo, que si lo había visto por el hospital, yo le dije que no, que había llegado hacía unos minutos de visita y que no me había dado tiempo de nada.

Pues mira chiquillo, si le ves por aquí y me esta buscando, dile que estoy en la habitación trescientos nueve, que le estoy esperando, que antes de que el blanco antifaz de la muerte me cubra de la pureza de la que carezco quiero decirle lo que le quiero, le he querido y lo querré siempre, no tengo nada que ofrecerle, pero si quiero que sepa que aun puedo regalarle los últimos suspiros, besos y abrazos que de mi torpeza pueda resucitar. Mira hijo, continuo, para don Quijote de la Mancha, ese idalgo caballero español, las prostitutas resultan ser en su mente, bellas damas y el propietario de la venta un gran noble que le dará cobijo, y yo quiero, aunque a la inversa de la cordura, que mi hijo crea que su madre fue una buena mujer, honrada, elegante y educada y que su padre fue un buen hombre de bien, trabajador y comprensivo, que las sin razón de la vida quiso que nuestras vidas estuviesen separadas y que no hubo un solo día ni una sola noche no que no me acordara de él, solo quiero volver abrazarlo, tenerlo entre mis brazos y sentir el calor y el olor de su cuerpo del que nunca pude disfrutar.

No pude aguantar más y preso de la voluntad de consolar a esa pobre mujer, dulcemente quité de su cara el pelo que cubría parte de ella, gracias hijo fueron sus palabras, de nada señora, si veo a su hijo no dude que le daré su misiva, le diré donde está y estoy seguro que vendrá lo antes posible. Que dios te lo pague joven, fueron sus palabras de despedida mientras a paso lento, muy flemático fue desapareciendo entre las frías sombras del pasillo, no miró para atrás, yo no dejé de mirarla hasta que desapareció, mientras una lágrima resbaló por mi mejilla como la que hacía unos minutos lo hizo por la mejilla de aquella mujer..... eran iguales.

No poseía otro testamento, no dejaba riquezas ni propiedades en el mundo, apenas unas palabras que para él, en aquel momento, significaba tal vez la dignidad de su madre, eso que no se deja comprar ni se deja de vender, y que es para el ser humano el grado supremo.

martes, 8 de septiembre de 2009

AMISTAD

¿Cuando empezamos nuestra amistad, en qué momento de nuestras vidas coincidimos en el lugar y el momento oportuno y empezamos a ser amigos?... no lo recuerdo...

No te parece divertido que con tu pareja siempre estas pendiente de llevar la cuenta, recordar el día y el momento exacto en que os conocisteis, cuando empezasteis la relación, a que hora, en donde... con tu pareja celebras aniversarios... y con los amigos es algo que realmente sobra, no importa el momento exacto, la hora, el día en que los conoces, solo importa que a través de esos años, meses y días vas construyendo momentos inolvidables.

Con el presente vas construyendo las anécdotas del ayer, recuerdas tal o cual fecha por haber ocurrido algo importante, pero no tienes la presión de recordar que en un día exacto fue cuando empezaste a ser amigo de alguien, es mas, tal vez al principio te caía mal, o no pensaste que algún día podrías llevarte bien con él, con la persona que hoy es tu gran amigo. Estuve pensando en todo ello, y bueno, no importa si los conozco de hace treinta y cinco, veinte, cinco anos o unos cuantos meses... lo importante es que en algún momento del tiempo se dio el milagro de la amistad, que a través de ese mismo tiempo se ha ido construyendo la confianza, el respeto, la tolerancia, el cariño mutuo.

¡Cuantos años cuesta el construirlos y que pronto se pueden perder! Esta frase tan genérica podemos aplicarla a la amistad, y es verdad, cuanto cuesta construir una buena amistad, crear un ambiente de confianza y cariño, cuantos momentos vividos y de pronto, como un castillo de naipes se derrumba ante la impasible mirada del tiempo.

Muchas personas entran y salen de nuestras vidas; ¡pero solo verdaderos amigos dejaran huellas en nuestro corazón! Para manejarte a ti mismo, usa la cabeza; para manejarte con los demás... ¡usa tu corazón!, siguiendo las directrices de este dicho podemos alcanzar la amistad plena, aquella que siendo pura y desinteresada perdura para toda la vida.

"El enojo es solo una carta de peligro. Si alguien te traiciona una vez, es SU falta; si te traiciona dos veces, es TU falta. Las grandes mentes discuten las ideas; mentes promedio discuten los eventos; mentes pequeñas discuten a las personas. El que pierde dinero, pierde mucho; el que pierde a un amigo, pierde mucho más; el que pierde la fe, lo pierde todo. Estas son algunas citas sobre la amistad y los ideales de la vida, entrañan un gran mensaje y sobre todo fueron escritas por personas que seguramente tienen más canas que yo. ¡Aprendamos de los errores de los demás, pero sobre todo de los nuestros!

El ayer es historia, el mañana es misterio, el hoy es un regalo, que llamamos presente. Vivamos el presente como si fuera el mañana, un mañana lleno de historia que nos conducirá a un buen futuro.

¡Gracias amigo¡.

domingo, 30 de agosto de 2009

LOS RECUERDOS

Hace relativamente poco, leí una poesía de Antonio Gala y hacía referencia a los recuerdos, al pasado y a una niñez y madurez pasajera, que montada en el vagón de la vida agitó el pañuelo para despedirse desde la ventanilla, la poesía comenzaba así, “Hoy se queman los antiguos recuerdos en una atardecer de antiguas llamas. Voces que no entendemos nos advierten de lo que no entendemos y nos mata, mientras la luz a su cubil retoma póstuma y delicada”.

¿Dónde duermen los recuerdos?, ¿en que lugar de nuestro complejo cerebro se ubican?, ¿quién los administra y los deja brotar de una vez para ofrecernos un segundo de alegría ajena, o tal vez un mal momento?. Todas estas preguntas sobrevinieron a mi subconsciente sin obtener una respuesta concreta y altina. Hoy me he planteado buscar mis recuerdos, todos y cada uno de ellos. En verdad, me pertenecen y me siento único propietario de ellos, su dueño sin contrato ni mucho menos escritura de propiedad, pero son míos y los quiero a todos. No quiero imaginar perderlos, como quien pierde la virginidad y no recuerda cómo, no quiero dejarlos olvidados en un baúl para quien algún día, movido por la curiosidad pretenda perturbarlos.

Me quiero agarra a mis recuerdos y aferrarme a ellos como el náufrago a la tabla que le puede salvar la vida, no quiero soltarlos porque de ellos depende mi existencia, y sobre todo mi razón de ser, ellos son el único legado que puede transmitir a mis hijos sin que un notario cobre por ello y sean el detonante de disputas entre hermanos, quiero apretar cerrando los brazos con tanta fuerza, que el aire comprimido en mis pulmones salga liberado de mi como la máxima expresión de liberación absoluta, dicen que el sueño es el alivio de las miserias para los que las sufren despiertos, pero soñar despierto también es loable, por eso quiero seguir soñando mientras escribo estas pobres líneas torcidas sin renglones que les sirvan de apoyo.

Hoy se pierden los últimos recuerdos y se queman las últimas palabras, y como la memoria, enemiga mortal de mi descanso, quiero quebrar las cadenas que me unen al árbol de la vehemencia, para poder gritar a los cuatro vientos que quiero ser dueño de mis recuerdos, de todos y cada uno de ellos. Y al pasar junto al jardín de los vivos, en la muralla de la conciencia y tras cruzar la verja de la prudencia, quiero entrar en otro mundo donde el pasado más lejano al que pueda llegar, desfigurado en un presente de sorpresas me estreche su mano a modo de…, buenas tardes viejo conocido, desde hoy quiero hacer este viaje contigo. Soy tus recuerdos.

jueves, 27 de agosto de 2009

EL AFRICANO DEL SEMÁFORO

Como cada mañana, el gallo digital que siempre tiene la garganta a punto, ese que durante toda la noche me observa con los ojos enrojecidos mientras mi subconsciente libra una frenética lucha entre pesadillas y buenos sueños, pues el gallo comienza a cacarear en ese preciso momento en el que la lucha se inclina por los buenos sueños, como siempre, y más bien preso de la pereza, con una leve acaricia en su costado duro como el acero, le invito a callar inmediatamente.

Una mañana más, rutina diaria que sopeso frente al espejo antes de aclarar mis perezosas ideas, y a modo de agua purificadora o bálsamo tónico refrigerante, acicalo una y otra vez mi rostro aun desfigurado por el sueño. Con más bien torpeza que destreza me coloco la ropa y me hago de todos los accesorios que me acompañarán durante todo el día, cartera, móvil y cuidadándome de no olvidar el reloj, que inescrutablemente no cesará en marcar cada uno de los segundos, minutos y horas que conformarán el nuevo día.

Una vez en el coche y dirección al trabajo, como quien se somete a una sesión de hipnotismo, la mente aun permanece casi en blanco, cuesta poner en marcha las más de cien mil neuronas celebrares automatizadas por el paso de los años, sintonizo el canal de noticias para conocer de primera mano la actualidad que nos rodea, lo que ha ocurrido y lo que se espera que ocurra, me coloco el cinturón de seguridad que será el encargado de desplanchar la camisa recién planchada, y como si estuviese activado un piloto automático imaginario recorro el laberinto de calles hasta llega a la carrera.

Pero como cada mañana, la luz roja en la lejanía marca la obligada detención en el semáforo que delimita el placer de la rutina, y ahí esta él, como el guardagujas que controla los cambios de vías en la antigua estación. Sus ojos blancos como el mármol recién extraído de la cantera, su piel negra blanqueada por el polvo que levantan los coches al pasar a su lado, un pantalón gastado y una camisa de manga larga dos tallas más grandes, que parase colgar de dos palos entrecruzados, unas camping dos números más grandes y una gorra que seguro que será la protagonista en una nueva mañana de calor.

Es él, el joven africano que todos los días alegra mis mañanas , no importa si le compro pañuelos o no, si le doy unas monedas o las dejo guardadas en el bolsillo pequeño de mi pantalón, el siempre sonríe, y sonríe de verdad. Lo veo en sus ojos que brillan desde la lejanía y que están tan abiertos que dan lugar ver las venillas rojizas que llegan hasta ellos. Es el, el chico de los pañuelos que cada mañana me inyecta una gran dosis de optimismo, no se desde que hora estará despierto, cuantos chiquillos tiene, cuanto gana cada día y ni siquiera si tiene hogar, si depende de las mafias o trabaja en libertad, asquerosa esclavitud del siglo veintiuno.

Es el amigo que me da el primero de los buenos días, el que a veces ni siquiera me ofrece pañuelos, sino que simplemente intenta darme la mano a través de un cristal que aun permanece cerrado, mi amigo anónimo, no se como se llama, de dónde viene, no se nada de él. Bajo la ventanilla y algunas veces le compro algo, le doy unas monedas o simplemente estrecho tímidamente su mano en la fracción del escaso minuto que tarda en cambiar de color el disco del semáforo, y ahí se queda él, con la sonrisa en su cara, con la bondad heredada de sus padres y el consuelo de una migajas que salieron del coche.

Y miro por el retrovisor, la agilidad de su juventud esquiva a los conductores que a su vez sortean a volantazos al africano, sigo mirando y de nuevo el semáforo en rojo le faculta para alegrar la mañana de otro conductor, a veces indiferente, otras sorprendido, pero la mayoría de ellas agradecido, una nueva sonrisa en su rostro encendido de juventud, un nuevo buenos días cargado de sinceridad, un nuevo apretón de manos comunicativo, y sobre todo un nuevo amigo al que seguro que mañana esperará impaciente.

Ahora comienza mi verdadera mañana, ahora el día es un poco más corto y no esta vacío, ya llevo conmigo las mayores de las satisfacciones, la de ver a un amigo con una sonrisa en la cara. Como cada mañana, el me espera para hacerme feliz, yo le espero para darle una mísera propina. Y entre nosotros dos, el cómplice semáforo que ha sido el culpable de una amistad para toda la vida, el interlocutor de una conversación inexistente, el mediador político entre dos mundos o mejor dicho, dos universos.

miércoles, 26 de agosto de 2009

SOBRE LA GRIPE "A"

Anochecía, la tenue y parsimoniosa luz de la lámpara de la mesita parecía aun más rojiza mortecina, fueron unos instantes en los que los párpados aun entreabiertos sucumbieron a la atracción magnética del sueño, y el reflejo de una luz clara y destellante avivaron los primeros fotogramas de una película que arrancaba sin guión, sin argumento y sin final predeterminado.

Un estornudo fue el detonante del final de la proyección de mi quimera, miles de partículas inundaron el reflejo, que desde la verticalidad de la luz proveniente de la pequeña ventana de mi estudio penetraban desde el exterior, sucumbió el silencio en un eco de sonidos sin nota que aun los pueda definir, y mucho menos reflejar en una partitura, y como el polvo galáctico que deja tras de si una peregrina estrella fugaz en su fricción con el cósmos, aparecieron acompañados de ácaros pasivos que descasaban en el sofá, miles de millones de pequeñas partículas de líquido pulverizado.

De pequeño, en esa edad en la que aún el sentido común no se nos ha sido presentado, y ni siquiera conocemos el nombre propio del sexo contrario, en la edad a la que algunos apellidaron pubertad sin saber de que familia provenía, me dedicaron unos renglones que decían que estornudar una vez era un deseo, dos veces era un beso y tres veces una carta, eso se aseveraba acerca de lo que el estornudo le traería a la persona que estornudaba.

Hoy han cambiado mucho las cosas, hace poco el veintisiete de abril, nos levantamos con la noticia de una gripe “Según las autoridades mexicanas, un brote de una nueva gripe porcina ha causado el fallecimiento de 103 personas hasta el momento. Asimismo, un total de 1.614 personas han sido hospitalizadas, la mayoría de las cuales ya han sido dadas de alta”. La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha calificado el brote como un “suceso de salud pública de preocupación internacional”, alertando incluso de una posible epidemia global.

Realidad o ficción, en el siglo veintiuno y aun ocurrían estas cosas, me trasladé a la edad media que leí algo en los renglones de algunos libros ya olvidados y hacían alusión a la peste, la primera de las pandemias, allá por el siglo catorce. De esta noticia a muchas más sobre el mismo tema, cada vez todo esto de la gripe porcina, llamada la gripe “A” por abreviar a los locutores televisivos y a los radiofónicos en su trabajo diario de la información, y a nosotros en nuestro coloquio particular, iba tomando un carácter más dramático y taxativo, de gripe a epidemia y de epidemia a pandemia, un trabalenguas que se cobraba vidas diariamente, que ponía en cuarentena a cuarteles enteros o dejaba sin vacaciones a excursiones completas retenidas en hoteles, en fin, cólera generalizada por la realidad de un virus que mata de verdad y se ceba con los más débiles e indefensos.

No importa lo que lo provoque, cada estornudo funciona casi de la misma manera. Las células nerviosas que se encuentran en la cubierta de la nariz se excitan y envían impulsos a la base del cerebro, el cerebro envía una señal a los músculos del pecho, y estos se convierten en un espasmo, apretando el aire de los pulmones, mientras tanto, los músculos de la faringe, un tubo que está detrás de la garganta, se cierran también, aquí viene el estornudo: En el instante siguiente el aire sale disparado por la nariz y también por la boca. Sorprendentemente, el aire que sale disparado por tu nariz durante un estornudo, puede alcanzar velocidades de hasta 100 millas por hora y ahora hay que detenerlo como sea, quizás entrenando a nuestro celebro a ello, o bien a modo de preservativo bucal utilizar un pañuelo de usar y tirar, una buena higiene y grandes dotes de destreza nos harán librarnos de la amenaza de lo se ha llegado a llamar la peste del siglo veintiuno, eso si, más “Light”.

Al incorporarme del aletargado descanso, entendí el verdadero significado de aquel dicho que de pequeño me llegaron a escribir a modo de poesía corta en las pasta de la libretas de matemáticas, estornudar una vez era un deseo, y ahora pido que acabe esta pesadilla que nos asola, a todo el mundo en general y a nadie en particular. Cuando me sobrevenga el segundo que se supone significa un beso, esperaré el beso de todos los que me rodean, familiares, amigos e incluso conocidos, como quien recibe la paz cuando celebra la eucaristía. Y si estornudo la tercera vez , que significa una carta, espero que sea tu carta de amistad, esa que cada año recibo imaginariamente aunque no lo sepas por navidad, para decirme que tanto tu como los tuyos os encontráis todos bien.

martes, 25 de agosto de 2009

COMIENZA LA ANDANZA

Buenos días,

Aquí comienza un largo viaje, un sin fin de vivencias, anécdotas, apuntes y comentarios del pasado del presente y del futuro más cercano, hoy comienza un viaje de ida del que no me he tomado la molestia de sacar el billete de vuelta, un largo camino por las hondas cibernéticas que unen a cada uno de nosotros para hacernos aun más próximos, un dilatado itinerario por la actualidad y los pensamientos que como comprobarás nunca nos llevarán hasta el final del recorrido, sino que nos ayudarán a seguir adelante, con pisada firme y buen talante, hay quien dice que la verdad adelgaza y no quiebra, y siempre nada sobre la mentira como el aceite sobre el agua y así andaremos y porque no nadaremos sobre los confines terrenales.

Hoy quiero pedirte que seas mi compañero de viaje, mi amigo, el copiloto de esta nave sin piloto automático que junto tendremos que manejar a nuestro antojo o necesidad, hoy quiero que seas el Sancho Panza que, con la mente totalmente lúcida hagas recapacitar a este Quijote al que su alocada mente no deja ver los enormes molinos que convertidos en gigantes otean en el horizonte, quiero que seas el bolardo donde puede amarrar mi barco cuando llegue a puerto y como no el bordón que utiliza el peregrino quiero que me sostengas en este camino lleno de subidas y bajadas, donde el llano casi que no existe y en definitiva nos hará más amigos cada día, algunos creen que para ser amigos basta con querer, como si para estar sano bastara con desear la salud.
Hoy comienza un largo camino literario, que entre tu y yo, y con las alforjas repletas de tolerancia, imaginación, actualidad y comprensión emprenderemos en busca de pasar largos momentos de reflexión, de un día a día que seguro que nos hará mejor persona, Las honestas palabras dan indicio de la honestidad del que las pronuncia o las escribe como dijo Don quijote de la pluma de Cervantes , por eso y por mucho más me atrevería a decir que la pluma es la lengua de la mente, así que dejemos correr ríos de tintas por nuestra mente para que nuestra lengua nucas se este quieta y así la pluma nunca, por nunca jamás deje de escribir.